En el marco del debate por posicionar a la Educación Superior como gestora del desarrollo local, el rector de la Universidad Gastón Dachary (UGD), Ricardo Biazzi propuso realizar mapeo de requerimientos y demandas de la comunidad para generar un banco de capacidades científicas, tecnológicas y de servicio de las universidades. “Nuestras propuestas académicas tienen que estar a tono con los requerimientos de capital humano altamente capacitado”, aseguró.
Las universidades, e institutos superiores, cumplen un rol fundamental en la formación de los recursos humanos de una sociedad. Así lo entendió la Agencia Universitaria de Posadas que organizó el 1° Webinar donde la propuesta fue analizar y debatir sobre cómo la Educación Superior puede ser gestora del desarrollo local. Participaron los rectores de todas las universidades, con asiento en Posadas, acompañados por el intendente Leonardo Stelatto, el ministro de educación, Miguel Sedoff, entre otras autoridades.
A días del encuentro y en conversación con el periodista Adrián Fain, el Dr. Biazzi consideró que “fue importante la convocatoria ya que es bueno generar estos espacios de encuentro”, a lo que agregó que “ahora llega el momento de hacer propuestas, desde nuestros lugares, para poner en acción lo que sacamos en limpio”.
¿Cómo piensa que la Educación Superior puede aportar al desarrollo local?
Creo que a Posadas universitaria la podemos entender desde, al menos, dos perspectivas de análisis. El primero referido al aporte de la educación superior como gestor del desarrollo local, y en un segundo, y no menos importante, el de una ciudad devenida en un fuerte centro regional de vida universitaria, atractiva para miles de jóvenes que sientan que valió la pena haberla elegido para su experiencia de vida estudiantil.
¿Qué debería requerir la ciudad, y su gestión municipal, a las universidades para lograr ese cometido?
Ante todo, interacción fluida. Ese convencimiento de la gestión está en clara sintonía con la Carta Orgánica que ordena promover y organizar acciones de investigación, innovación y aplicación científico-tecnológica, en coordinación con universidades, tanto de gestión estatal como privada. Es percibir, en definitiva, a las instituciones de educación superior como generadoras y mediadoras de conocimiento científico que puedan ser requeridas por la ciudad para mejorar su desarrollo integral.
Creo que, para responder adecuadamente a las demandas de Posadas, es muy importante definir áreas o ejes prioritarios de intervención, a partir de la vinculación de las propias investigaciones del sistema científico-tecnológico, así como de los propios estudios que el municipio tenga efectuados, como para no andar a tientas ni improvisando. Por eso, como rector de la UGD, propuse la realización de un mapeo de requerimientos y demandas puntuales del municipio, como de los diversos actores sociales de la vida de Posadas y, tras cartón, generar un banco de capacidades científicas, tecnológicas y de servicio de las instituciones universitarias para atenderlos.
En cuanto a las demandas de formación profesional, que pueda plantear la ciudad, pienso que todas las instituciones de educación superior tendrán siempre un oído atento a las mismas. Ahí, como UGD, formulamos una propuesta que consiste en relevar las áreas de vacancia y formación profesional no atendidas en la zona, o que haya que reforzar.
¿Cree que existen condiciones para poder formular, sostener y potenciar la economía del conocimiento como herramienta de desarrollo local?
Estoy convencido aquí, que tenemos una excelente oportunidad, como ciudad me refiero, a hacer un diferencial respecto a las ofertas tradicionales o ya existentes en la zona y trabajar en iniciativas académicas más innovadoras de formación profesional. Hoy por hoy, todas las actividades se caracterizan por el uso intensivo de ciencia y tecnología y van requiriendo más y más capital humano altamente calificado. Biotecnología, ingeniería genética, inteligencia artificial, robótica, servicios digitales, informáticos, producción y posproducción audiovisual por citar algunos campos de conocimiento que impactan, y lo harán cada vez más en los procesos sociales y económicos que vivimos. Debemos poner nuestras propuestas académicas a tono con ellos. Tenemos legislación nacional y provincial que apuntalan y promueven la llamada economía del conocimiento que consagra esa perspectiva. ¿Por qué no Posadas?, entonces, como un centro de actividades productivas que se caracterice por el uso intensivo de tecnología y potencie emprendimientos, creando puestos de trabajo, registrados y bien remunerados
Hay ciudades en el país que lograron articular sus actividades públicas y privadas con los gobiernos locales y sus universidades y que hoy hacen punta. El caso de Rosario con múltiples empresas de biotecnología para el desarrollo agroexportador; la ciudad de Tandil con algo así como 150.000 habitantes, pero que como polo informático concentra actualmente más de 50 empresas de software que emplean a 15000 personas; o Bariloche produciendo reactores nucleares cotizados en el mundo. ¿Por qué no Posadas? Insisto con la pregunta. Convertida en la región en un ámbito reconocido de desarrollos productivos que se caractericen por el uso intensivo de tecnología, con recursos humanos altamente calificados. En el caso de la UGD y a partir de la fuerte expansión a la robótica y las tecnologías de la información y la comunicación que produjo la provincia, entendimos oportuno ofrecer estudios universitarios para quienes teniendo una fuerte aproximación a las mismas puedan obtener un título profesional en esos campos. Acabamos de arrancar en este difícil 2020 con la Tecnicatura Universitaria en Robótica y Automatización Industrial que forma personas capaces de participar en la administración de sistemas que brinden soluciones mecatrónicas orientadas a la automatización de procesos. Estamos tramitando, también, la acreditación ante la CONEAU de la carrera de Ingeniería Industrial que esperamos poner en marcha en 2021, buscando formación científico-tecnológica con enfoques innovadores y flexibles y que tendrá sólida vinculación con la carrera ya existente en nuestra institución de Ingeniería en Informática.
Usted habló de dos perspectivas, la primera vinculada al aporte educativo, pero también puntualizó en la conformación del centro regional de vida universitaria. ¿Cómo lograrlo?
Me entusiasmé con el primer aspecto, pero también es verdad que se puede trabajar muy bien entre la Agencia Universitaria y las instituciones de educación superior, asentadas en Posadas, para promocionarla como una opción para el estudio universitario de jóvenes venidos de otros lugares de la provincia o la región. Creo que debería ofrecer distintos descuentos y beneficios culturales, económicos, deportivos, así como muchas otras oportunidades. La Agencia ha venido coordinando tareas con nuestras instituciones y seguramente tendremos que fortalecerlas y convencer a otros sectores, empresariales y comerciales por dar un ejemplo; sobre el valor de apostar a la llegada de muchos más estudiantes a la ciudad. Hoy hay en el mundo rankings de universidades, pero también de las mejores ciudades universitarias para vivir. Boston, Sidney, Barcelona, por citar algunas. Londres tiene más de cien mil estudiantes extranjeros. Pero no hay que ir tan lejos, la ciudad de Mendoza tiene 70.000 estudiantes universitarios, que impactan directamente en la economía de la ciudad y sus zonas contiguas. Posadas, además, está en un lugar privilegiado con relación a nuestros vecinos que, con costos menores, pueden desde Paraguay o alguno de los tres estados limítrofes de Brasil llegar por tierra y sin tener que hacer vuelos a Buenos Aires u otras capitales argentinas distantes, para cursar carreras de grado, posgrado, o cursos de actualización profesional con muy buen nivel académico y con titulaciones debidamente acreditadas.